El próximo lunes se iniciará la revisión de 10 plantas y tres depósitos de frío para el envío de carne a la nación asiática.
El próximo lunes comenzará a trabajar una misión integrada por dos inspectores coreanos para habilitar los frigoríficos que ingresarán con carne fresca a Corea, seguramente en los primeros meses de 2013.
El director general de los Servicios Ganaderos, Francisco Muzio, destacó a El Observador la importancia de este trámite final luego que el país fuese habilitado en agosto, si bien no vaticinó una fecha en la que comenzará a entrar el producto desosado y madurado al mercado coreano.
Los expertos coreanos, que arribarán a Uruguay el domingo, cumplirán su tarea durante 10 días en 10 plantas frigoríficas y en tres depósitos de frío que se utilizan para almacenar carnes. Se espera que también llegue una segunda misión para inspeccionar el resto de los frigoríficos que expresaron su interés en ser habilitados a exportar a ese país, dijo Muzio.
Como es habitual será revisado todo el proceso desde que ingresan los animales a la planta frigorífica y la gestión de faena. Incluye tareas documentales, de inspección sanitaria y de inocuidad de los alimentos. El ingreso de carnes frescas a Corea posiciona a Uruguay como uno de los países con mayor penetración en el mundo y solo resta Japón para conquistar así a los dos mercados top, dijo el presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Luis Alfredo Fratti, a la Secretaría de Comunicación de la Presidencia.
Agregó que aún no está definido el tipo de producto a exportar, ya que la experiencia que tiene Uruguay es de cuando el país era libre de fiebre aftosa sin vacunación e ingresaba también carne con hueso.
Explicó que Corea paga muy bien las menudencias y, según se está observando ahora, van a entrar cortes de alta calidad.
Europa ajusta el bienestar animal
El director de la División de Industria Animal, Héctor Lazaneo, informó a El Observador que a partir del 1° de enero próximo la Unión Europea (UE) comenzará a aplicar normas más específicas sobre bienestar animal, en la faena de vacunos, que también deberán cumplir los proveedores de carne a ese mercado. Opinó que estas nuevas exigencias no requieren mayores inversiones en frigoríficos, sino que obligarán a sistematizar más sus procedimientos.
Fuente: El Observador