Christian Arntz, productor de carne y leche de la Región de Los Lagos y timonel de la Federación Nacional de Productores de Carne (Fedecarne) está a poco más de un año de concluir su segundo periodo como presidente del gremio y en conversación con Revista Campo Sureño analizó el panorama actual y futuro del sistema productivo de la carne.
En estos tres años y medio de labor gremial asegura que ha realizado un arduo trabajo aunque los resultados han sido escasos, pero el gremio está en una etapa de crecimiento y fortalecimiento donde los dos ejes de su labor están puestos en poner de acuerdo la cadena con un eje en común de lo que quieren desarrollar en el futuro; y mejorar la productividad porque que la única forma de que un productor gane más es siendo más eficiente.
Además tiene planificado comenzar con un sistema de recaudación tal como lo hace la Federación Nacional de Productores de Leche (Fedeleche) “porque de haber contado con recursos podríamos haber presentado algún tipo de salvaguardias en aquellos casos cuando entra carne a bajo precio, pero para hacerlo necesitamos contar con 200 o 300 millones de pesos que Fedeleche los tiene pero Fedacarne no. Eso marca la defensa de los productores. Nosotros podemos hacer mucho si tenemos financiamiento, pero de lo contrario solo podemos hacer propuestas”, comenta el timonel de Fedecarne.
TRAZABILIDAD
Un tema de contingencia por estos días es la reapertura de la cuota de exportación de carne hacia mercados europeos ¿Cómo ve esta reapertura, luego de mantenerse suspendida desde marzo de este año producto de las falencias en el sistema de trazabilidad chileno?
Es una noticia muy buena ya que permite una alternativa al mercado nacional, si bien Europa no está con precios tan buenos como otros años principalmente por la crisis económica, de todas maneras paga más que el mercado nacional por ciertos cortes como el lomo y filete, y eso da la posibilidad de que se pueda sacar carne de alta calidad a buen precio y eso descongestiona el mercado nacional y permite dar una variante a los productores.
-¿Qué consecuencias dejó el mal funcionamiento del sistema de trazabilidad que se detectó luego de una fiscalización de autoridades de la unión Europea?
Menos de 60 productores quedaron con el Programa de Planteles Animales bajo Certificación Oficial (Pabco) carne y leche, cuando antes eran 2 mil los productores que tenían este sistema, sólo de carne eran 490. De los habilitados para exportar carne, aproximadamente quedan entre 15 y 20 de la Región de Los Lagos, los cuales concentran cerca de 25 mil cabezas.
Si bien la exportación de carne hacia mercados europeos representa sólo el 1% de la producción nacional ¿cuál es el desafío de los productores que crían vacunos de exportación y que deben cumplir con las normas de trazabilidad?
Será un desafío importante porque deberán ir corrigiendo los errores de trazabilidad que causaron que saliéramos de europa. Los productores deben cumplir con la normativa al pie de la letra cuando esté clara; cuando los plazos y los sistemas funcionen. Entendemos que en algunas regiones del país el sistema de trazabilidad ha funcionado relativamente bien, pero al parecer en la Región de Los Lagos, que tienen una mayor concentración de ganado es donde el SAG ha tenido mayores problemas. Hago un llamado a la autoridad que si ésta es la región más débil es la zona que tiene que fortalecerse con mayor capacidad para ejecutar la trazabilidad porque tienen una mayor capacidad productiva.
¿El sistema de registro animal tiende a colapsar porque en Los Lagos hay más masa ganadera o porque adicionalmente hay otros factores asociados?
Los profesionales de acá no se han creído el cuento respecto al problema que significa una mala trazabilidad y no han avanzado todo lo que deberían avanzar, porque los técnicos del SAG, se ven sobrepasados.
¿Entonces como timonel de Fedecarne cuál cree que es la solución para mejorar este problema?
La solución está en juntar al sector público y privado a nivel nacional, es decir, los productores, ferias, plantas faenadores, y en conjunto con la autoridad definir un camino único de implementación de la trazabilidad, porque la trazabilidad no es solamente un software, es un sistema completo de registro de la masa ganadera de un país.
¿Al tener tantos problemas de registro animal, se puede decir que el número de cabezas al año 2011 era de 2.177.386 cabezas o es una estadística que no representa la masa ganadera real de Chile?
Hoy día no tenemos, ni nadie tiene, certeza real de la cantidad de bovinos que existe en Chile.
¿De quién es responsabilidad que ocurra tal nivel de imprecisión?
Es responsabilidad de los entes que toman las estadísticas, Instituto Nacional de Estadística (INE), Oficina de Estadística Agropecuaria (Odepa) y el Ministerio de Agricultura, ya que son los que elaboran los censos agropecuarios, y por otro lado de los productores porque son quienes muchas veces entregan información inexacta o simplemente no entregan información del movimiento animal de sus predios.
¿Cree que el nuevo sistema de trazabilidad que se llama Sipec Cliente, cumplirá con los estándares que requiere la producción agropecuaria chilena para tener una estadística real de la masa ganadera?
Por las reuniones que hemos tenido el sistema se pondría en marcha blanca ahora en octubre con ciertos productores y estaría disponible para los demás productores a partir de enero de 2014. Nos parece un buen sistema, si se cumple con lo que dice podríamos decir que a partir de enero de 2014 contaríamos al menos con la herramienta informática para poder llevar la información y sería el punto de partida, porque el inicio del registro no es poner aretes, la trazabilidad es cuando ese arete es identificado en una base de datos.
Producción
-Actualmente la producción ganadera va en descenso-entre 2007 y 2011 bajó en 450 mil animales- y se dice que la producción de carne está muy por debajo de la producción de leche ¿Qué ha gatillado la merma de la masa ganadera de carne y qué necesita este sector para mantenerse en el sistema productivo de manera más competitiva?
Hay varias aristas. Por un lado la industria de la leche está muy preocupada que los productores aumenten su eficiencia, están mucho más íntimamente ligados al productor, en cambio yo como productor ganadero no soy proveedor de nadie, puedo vender a la feria u otros. Tengo un abanico de posibilidades. Desde ese punto de vista es un mercado un poco más amplio, pero el problema que tiene es que la demanda está concentrada en pocos poderes de compra –plantas faenadoras- y eso hace que se limite la competencia, produce un abuso de posición dominante, en el cual los supermercados abusan de las plantas faenadores y a su vez estas abusan de los productores y los productores no tenemos de quien abusar.
¿Cómo se puede solucionar esa falencia?
La única manera de solucionar esa falencia es cambiarla por ley, una tan revolucionaria, y políticamente compleja de llevar a cabo que requiere de tanto temple por parte de cualquier gobierno que ni siquiera la hemos pensado. Pero debería ser una normativa que, por ejemplo, establezca que si hay un universo de tres cadenas de supermercados, estos en un plazo de un año se fusionen en 50. Eso significa un cambio de paradigma, sin eso no hay arreglo, porque el principal problema que tiene la producción primaria, en todo orden de cosas, es el retail.
¿Cómo ha sido la relación con la Fiscalía Nacional Económica, como un ente fiscalizador en esta materia?
Buena, pero ellos mismo señalan que hoy Chile no tiene un cuerpo legal para poder regular a estos monstruos. Porque en Chile el retail es eso. Un monstruo que se está comiendo al país y eso se soluciona con leyes que hoy no están. Si hoy tuviéramos un sistema de minimercado no estaríamos como estamos de atomizados y los precios de la leche y carne serían otros y estarían más reflejados a lo que es el comercio internacional.
Aquí adicionalmente se debe mejorar los sistemas de producción de carne ¿Cómo se puede ser más eficiente?
En la carne hay mucho espacio para ser muy eficiente. Sólo se debe mejorar el pastoreo y el manejo ganadero para tener una mejor producción por hectárea. Actualmente el promedio nacional está alrededor de 350 kilos por hectárea, mientras que lo óptimo para Chile , debería ser de 1.000 kilos, pero por mientras, positivo sería estar entorno a los 700 kilos como promedio.
¿De qué depende ese aumento al doble?
No requiere de mucha inversión, sino que implementación de tecnología barata. Como es pastoreo con cerco eléctrico y el control del pesaje. El productor debe acostumbrase que debe controlar a sus animales porque el pesaje le indicará si está haciendo bien o mal su pega.
POTENCIA AGROALIMENTARIA
¿Cree que la creación del nuevo ministerio de agricultura y alimentos anunciado por presidente, Sebastián Piñera solucionará los problemas que tienen actualmente?
Claramente un ministerio ampliado fortalece el actual Ministerio de Agricultura y por otro lado hace más ágil su gestión porque hoy día las certificaciones están en múltiples organismos -Servicio de Salud, el SAG y otros-. Nos parece el camino correcto, pero largo, porque los gobiernos que han formado estos ministerios unificados, como es el caso de Nueva Zelandia, se demoró 11 años, entonces nosotros esperamos que sea en menos tiempo, pero esa menos cantidad de tiempo también tiene que ir apoyada del sector público y privado para que nazca un organismo que solucione los problema de todos.
- ¿Cuál es la proyección que hacen respecto al concepto “Chile potencia agroalimentaria” en relación a la producción de carne en un plazo de 10 años?
La proyección en cuanto a la producción de leche es a tener un crecimiento lento y en carne un decrecimiento. Desde que se comenzó hablar de potencia agroalimentaria chile perdió el 25% de su masa. Esto ha sido un desastre.
¿Por qué se ha perdido un cuarto de la masa ganadera en tan poco tiempo?
Porque por mucho tiempo se transformó en un mal negocio. Era el peor de todos los negocios ganaderos -fundamentalmente la crianza, cuando este es el motor de la producción de carne, porque han aumentado los costos y porque la leche es un mejor negocio ya que entrega un mejor margen por hectárea. Situación que está dado por un tema biológico, porque para producir un kilo de carne necesitas 10 kilos de materia seca y para producir un kilo de leche necesitas un kilo de materia seca. Con el mismo animal comiendo la misma pradera uno produce $2.000 y el otro $1.000. Para igualar a la leche el kilo de novillo debería estar en $2.000 y no $1.000 como está hoy. Pero el riesgo de la producción de leche es mucho más alto que de la carne, por eso muchos ganaderos producen carne, porque si bien es cierto ganas menos, pero tu riesgo es menor.
¿A este paso y con este panorama en qué queda el concepto “Chile potencia Agroalimentaria”?
Queda sólo en el nombre.
¿En algún momento se llegará a cumplir este objetivo?
Podemos llegar, pero no sabemos en cuantos años. Pero primero tenemos que tener una visión de la cadena y de la industria faenadora, porque es la que tiene que exportar más eficientemente, es la que tienen que dar mayor valor agregado a sus productos y hacer esfuerzo para que pueda pagar más a sus productores y logre el incentivo para producir más.
Pero actualmente está ocurriendo un proceso para mejorar en parte el problema de baja rentabilidad, por ejemplo a través de carnicería boutique. ¿Cómo ha funcionado aquello?
Ese es un paso en la dirección correcta. Nuevos productos y canales de comercialización a través de la comercialización en carnicería boutique, mejorar las carnicerías de barrios y nuevos productos. Es la innovación en la producción industrial y una innovación en el manejo de los animales, además de la eficiencia productiva.
¿Cómo se puede sacar provecho a un factor muy relevante de que en la zona se produce una de las mejores carnes del país?
A través de publicidad y promoción, porque esa carne y con esas propiedades no la vendemos los productores sino que las plantas faenadoras.
¿Pero la producen los ganaderos que son los que tienen bajas rentabilidades?
Si yo tuviera una planta faenadora así como los productores de leche tiene a la Colun, otro sería el panorama, porque ahí la responsabilidad es mía.
¿Se puede hacer una cooperativa de producción de carne?
Claro que se puede, pero por diversos motivos nunca ha fructificado la idea, porque no se ha hecho bien, no hemos tenido la experticia para hacerlo y porque los productores también tenemos un carácter muy individualista que nos juega muy en contra.
Respecto al trabajo de tipificación y etiquetado de la carne ¿en qué etapa está ese trabajo?
Está avanzando de manera lenta. Se está trabajando en una mejor rotulación de los cortes para tener mayor información y precisión porque el consumir debe saber la procedencia de la carne. Debe poder diferenciar entre especie o subespecie distinta –entre Bos Taurus que es lo que existe en Chile, Argentina y Uruguay – mientras que en Paraguay lo que más existe es bos indicus, que son los animales que tienen joroba y orejas largas,- y la gente no sabe que está consumiendo un cebú y no un vacuno.
¿En cuanto tiempo más se debería tener lista esta norma de tipificación y rotulado?
Este año debería estar lista y la gente lo podrá notar en el supermercado.
Fuente: Revista del Campo Sureño