El director ejecutivo de la Asociación Brasileña de la Industria Exportadora de Carne Bovina (Abiec), Fernando Sampaio confirmó que Rusia autorizó a exportar a ese país carne vacuna a otros seis frigoríficos, creciendo así las posibilidades de neutralizar los impactos generados por la prohibición que recientemente se había impuesto desde Moscú a otros nueve frigoríficos.
Ahora Brasil posee 19 frigoríficos que pueden exportar a Rusia, dijo Segundo Sampaio, un número que se considera suficiente para mantener el nivel mensual de los embarques a Rusia, en el entorno de las 30.000 toneladas.
La decisión de Rusia de autorizar más establecimientos es una señal de que la medida privativa tomada contra otros nueve frigoríficos no tuvo motivación comercial sino sanitaria, porque la sanidad rusa está realmente preocupada por la ractopamina, sustancias cuyos residuos se encontraron en lotes enviados a aquel país.
Esa sustancia es utilizada para promover el crecimiento en vacunos y suinos, está prohibida en Rusia y Brasil ha suspendido su uso, pero aún se encuentran residuos.
La decisión rusa también demuestra que ese país necesita de la carne brasileña ya que Estados Unidos y la Unión Europea tiene una oferta reducida e insuficiente para cumplir con la cuota de exportación a Rusia que es de 60.000 toneladas.
Esa situación favorece a la industria brasileña que ha crecido: en setiembre, Brasil exportó 31.000 toneladas de carne vacuna a Rusia; en el acumulado del año Rusia importó 240.000 toneladas.
Fuente: Agromeat