Las autoridades holandesas en materia de seguridad alimentaria (NVWA) han retenido la comercialización de lotes de carne de vacuno, que suman unas 690 t, obtenidos en un matadero de Gelderland, identificado como Van Hattem Vlees, debido a que se ha detectado la presencia de ADN equino en cuatro de ellos.
Según se ha detectado en los registros de la empresa, que sacrifica tanto ganado vacuno como equino, se sacrificaron un mayor número de caballos de los que se habían declarado oficialmente.
La carne, que había sido enviada ya a diversas industrias cárnicas, ha sido retirada del mercado hasta que la empresa muestre el origen de la carne y su trazabilidad.
La NVWA ha dado de plazo a la empresa hasta el próximo 3 de febrero para mostrar su trazabilidad. De no cumplir con los requisitos exigidos se arriesga a la suspensión de su actividad.
Fuente: Eurocarne Digital