Positiva visión del gobierno sobre el agro contrasta con críticas de la SNA
16 junio 2015

 Tras el llamado al diálogo para restablecer las confianzas, el líder de la SNA, Patricio Crespo, dijo que están “a la espera de acciones concretas”.

 
A pesar de las altas probabilidades que la agricultura sea el pilar del crecimiento del país este año al ser el sector de la economía local que más se expandió en el primer trimestre con un 8,5%, los empresarios agrícolas han preferido poner paños fríos a esta fuerte dosis de optimismo que inspira el gobierno.
 
Según aclaró ayer el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Patricio Crespo, la competitividad del sector ha mejorado, sin embargo “los empresarios no están apostando al futuro, tienen temor a invertir, las cifras oficiales así lo demuestran”, afirmó.
 
En su exposición, en el marco del seminario “¿Cómo viene la temporada 2015-2016?” organizado por la entidad gremial, el dirigente fue enfático en señalar que “en Chile el sector privado no está viendo fantasmas. Está experimentando realidades que le impiden actuar para reimpulsar el crecimiento”. Por esto, aclaró que el empresariado quiere colaborar y sacar al país adelante. “Sólo requiere certezas y claridad de intenciones”, dijo.
 
Si bien Crespo reconoce buenos aires para el sector pese a lo determinado que está por el ciclo económico y climático, bajo su lupa, el país atraviesa momentos complejos en medio de una economía que aún no logra reactivarse y que sigue resentida en parte importante por el “clima de incertidumbre” que se generó en el último tiempo. Por ejemplo, a través de la reforma tributaria y laboral y que se suma, además, a una reforma al Código de Aguas, un “proceso constituyente” y diversos episodios de violencia en el sur.
 
Así, la panorámica del sector para los empresarios agrícolas tiene ciertos matices frente a la presentada por el ministro de la cartera, Carlos Furche, quien también participó en el evento.
 
Para el secretario de Estado la agricultura tiene buenos augurios este año, ya que la economía agrícola durante el período 2010-2013 creció, en promedio, menos de 2%, y actualmente existen condiciones estructurales para esperar buenas proyecciones a futuro. Sin ir más lejos, para este año prevé un aumento entre 5% a 6%.
 
Asimismo, Furche aprovechó la oportunidad para informar que en las próximas semanas se comenzarán a entregar los recursos programados -por unos $ 10.500 millones- para ayudar a los agricultores del norte afectados por el último temporal, para que la próxima temporada “tengamos algo relativamente parecido a la normalidad”. Y algo similar -añadió- ocurrirá con los afectados por la erupción del volcán Calbuco, en la zona sur.
 
Eso sí, se hizo cargo de las preocupaciones planteadas por el líder de los agricultores en relación a la reforma laboral, la modificación al Código de Aguas y la sequía. “No hay que engañarse, las sociedades estáticas pueden en apariencia no generar incertidumbres, pero pueden acumular un nivel tal de conflictividad social que en un determinado momento hacen imposible el cambio anticipatorio”, puntualizó Furche.
 
Y remató: “Más allá de la incertidumbre, yo quiero reiterar que los cambios que se han planteado eran absolutamente necesarios”.
 
Aseveración que, incluso, fue recordada por Crespo tras el encuentro. “No se trata que nos opongamos a los cambios, lo que queremos son cambios que se condigan con las necesidades del siglo XXI y no tener la mirada puesta en la primera mitad del siglo XX”, criticó.
 
Las críticas no sólo apuntaron a las reformas. Crespo también puso sobre la mesa el proyecto de Estatuto del Temporero que debiera ingresar en septiembre al Congreso, pero que aún no los han llamado para participar en su discusión. “El proyecto de Estatuto del Temporero que ayudamos a redactar como mesa duerme en la Cámara de Diputados. Mientras tanto, seguimos a la espera de que el gobierno nos invite a participar en el nuevo proyecto que prometió ingresar al Congreso”.
 
 
PRODUCTIVIDAD Y BAJOS PRECIOS CONCENTRAN INQUIETUDES
 
A la exposición de las autoridades, le siguió una mesa redonda donde representantes de productores de frutas, vinos, lácteos, cereales y carnes discutieron sobre los principales desafíos, oportunidades y perspectivas para los distintos sectores.
 
Inquietudes como la reforma laboral -especialmente en el tema del reemplazo en huelga-, el déficit hídrico y los paros portuarios se repitieron en los discursos, aunque con diferentes matices. Sin embargo, tras los problemas comunes existen diversas inquietudes propias de cada rubro.
 
Es así como el presidente de Decofrut, Manuel José Alcaíno, resaltó los costos de los paros aduaneros y portuarios para su industria, además de mostrarse preocupado por la situación de la mano de obra, por la naturaleza del trabajo agrícola.
 
Para el negocio vitivinícola, las perspectivas que entregó Alberto Siegel, presidente de Viña Siegel, son más bien negativas. ¿La razón? Explicó que el sector está luchando con un exceso de stock que se ha traducido en bajos precios a nivel mundial, lo que en su opinión solo se puede solucionar con una mayor producción o una calidad "de elite" en los vinos.
 
El socio de la consultora Smartges, Emilio Cuevas, analizó el mercado de la leche, señalando que los principales desafíos apuntan a aumentar la productividad y realizar mejoras a nivel tecnológico relacionadas a la misma variable. En tanto, el presidente de la estatal Comercializadora de Trigo SA (Cotrisa), Manuel Marfán, se enfocó en proyectar cómo será la producción, sosteniendo que la presente temporada será más bien "tranquila" y no necesitará la intervención de Cotrisa de manera masiva. Finalmente, el presidente de la Corporación de la Carne (CorpCarne), Harry Ju¨rgensen, resaltó la necesidad de mejorar las exigencias sanitarias, con el fin de poder ampliar la exportación a mercados con alto potencial de consumo de productos cárnicos, como por ejemplo China. Para esto, llamó a desincentivar el uso de anabólicos en bovinos y a estudiar un nuevo sistema de trazabilidad para efectos sanitarios, entre otros.
 
 
AGRICULTORES LAMENTAN CRECIMIENTOS NULOS O CAÍDAS EN EXPORTACIONES
 
Empresarios advierten freno en actividad por sequía e incertidumbre de reformas
 
Bauzá estudia producir en regiones de Perú para evitar problemas hídricos.
 
En el sector agroindustrial hay visiones que fluctúan entre el optimismo moderado y la preocupación severa, según se desprendió de los empresarios que asistieron al seminario de la SNA. Sin embargo, la mayoría dice estar inquieto por el clima así como por la incertidumbre de las reformas impulsadas por el gobierno, en concreto la laboral, hasta el punto de haber decidido paralizar sus planes de inversión en plantas y equipos para la temporada 2015-2016 y hasta que se resuelvan estos flancos.
 
"Estamos en compás de espera, mirando con cierto escepticismo lo que pase para los próximos 12 meses con el clima, la política para los incentivos para invertir y reconvertirnos, así como la renovación de las líneas de crédito por parte de los bancos. Por la sequía nos sentimos imposibilitados completamente de hacer grandes inversiones porque venimos saliendo de un sector en el norte debilitado", explica Lorenzo Bauzá, presidente de Bauzá Export.
 
Además, asegura que por efectos climáticos están mirando posibilidades de inversión en Perú, entre ellas en las zonas de Piura, Lambayeque o Chiclayo o, por otro lado, en la zona centro de Chile, en la VI región. "Si no llueve creemos que vamos a seguir disminuyendo las exportaciones. Ahora hemos caído un 50% de lo normal, es decir hasta los US$ 7,5 millones, y si no llueve esto puede bajar un 25% más. Estamos creciendo con cerezas pero no es suficiente para suplir la caída en el norte", destaca. En tanto Harry Jurgensen, presidente de Fegosa, empresa de la feria de ganaderos de Osorno, dice que "las inversiones las tenemos en stop. La industria de la carne está óptima pero tenemos que tener la materia prima para exportar. Si no abrimos el mercado a China, Asia en general, vamos a seguir con crecimiento plano porque el mercado de la carne está en China pero tenemos que ponernos de acuerdo en ver las certificaciones sanitarias que necesitan".
 
El ejecutivo señala que en 2016 "deberíamos tener resueltas nuestras aperturas comerciales en el extranjero y, de esa forma, generar una crianza importante. Por eso debemos discutir el tema de no aplicar hormonas de crecimiento de manera que podamos cumplirle a los mercados más exigentes del mundo, como son Europa y China". Por su parte, José Miguel Steigmeier, presidente de la Corporación de Desarrollo Social del Sector Rural (Codesser), sostiene que el sector se encuentra "muy complicado con la reforma laboral". "El tema climático es impredecible, pero el mayor problema es la gestión del gobierno. Esperábamos tener una década importante en crecimiento por un dólar más alto, pero esta crisis de confianza ha llevado a la paralización de inversiones", destaca.
 
Fuente: El Diario Financiero
Más Noticias