El Ministerio de Ganadería y Agricultura de Uruguay y la Dirección Nacional de Medio Ambiente del vecino país (Dinama) llevan habilitados un total de ocho feed lots para participar del cupo de carne bovina concedido por la Unión Europea (UE-27) para animales producidos en corrales de engorde.
Fuentes del Ministerio de Ganadería dijeron al diario uruguayo El País que hasta la semana pasada había 30 empresas que se presentaron ante Dinama para participar del nuevo cupo y que en los próximos días crecerá el número de habilitaciones.
La cuota –creada en 2009 en el marco de un litigio por la carne con hormonas que mantuvieron estadounidenses y europeos– cuenta actualmente con 20.000 toneladas anuales, pero a partir de julio de 2012 pasará a ser de 45.000 toneladas y deberá ser compartida entre cinco países: Australia, Nueva Zelanda, Canadá, EE.UU. y Uruguay.
“Estamos analizando nuestra competitividad frente a la de Australia y EE.UU. para no llevarnos sorpresas y ver qué tan competitivos somos en la producción de un kilo de carne a granos”, aseguró a El País Marcelo Secco, director del Grupo Tacuarembó (Marfrig) y directivo de la Asociación de la Industria Frigorífica del Uruguay (Adifu).
“Hay que jugar mucho con los números para ver si podemos ser competitivos. Australia está con un ganado de reposición más barato y el grano con algún dólar menos. Los importadores hoy están más preocupados en ver qué es lo que pasa con el tipo de cambio y con su economía, que por usar cuota, pero la van a usar”, agregó.
El nuevo cupo no es una “cuota país” como la Hilton, en la cual los frigoríficos uruguayos pueden colocar cada año 6300 toneladas. En este caso es el importador europeo el que administra el cupo a partir de negociaciones particulares con las empresas privadas de los países habilitados. La gran ventaja es que el cupo tiene arancel cero (cuando el arancel Hilton es del orden del 20%).
La incorporación de Uruguay a la nueva cuota fue publicada en el Diario Oficial de la UE-27 a fines de agosto pasado.