Los ganaderos de vacuno de carne afrontan con pesimismo una nueva ronda de negociación entre Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay) y la Unión Europea (UE), que se celebra durante este semana en Montevideo y que está previsto que hoy finalice. Fuentes del sector han recordado a Efeagro que un acuerdo entre la UE y Mercosur sería “nefasto” para la ganadería comunitaria y, principalmente, para el vacuno de carne.
Desde que se retomaron el año pasado las negociaciones, que llevaban paralizadas desde 2004, no se han producido avances y uno de los principales obstáculos ha sido el apartado agrícola y el impacto negativo que tendría un tratado de libre comercio sobre el sector comunitario y, en especial, para el vacuno de carne. Los productores europeos, a principios de 2011, difundieron un estudio en el que aseguraban que la liberalización de las importaciones del bloque latinoamericano provocaría unas pérdidas de 25.000 millones de euros para el sector de la UE. El gerente de Asociación Española de Productores de Vacuno de Carne (Asoprovac), Javier López, ha explicado que todo lo que implique incluir cantidades adicionales a la cuota fijada para los países de Mercosur afecta al sector comunitario “porque nuestros costes de producción son más caros que en terceros países”. Según López, la UE se ha sobrecargado de costes legislativos que no es capaz de imponer a la producciones de terceros países, “lo que nos hace ser muy poco eficientes”. Desde la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja), Adolfo Alcalde ha destacado que el principal afectado por un acuerdo sería el vacuno de carne y que si se incrementan las exportaciones procedentes de estos países, “el colapso sería importante y vendría carne más barata”. Alcalde, además, ha afirmado que esta carne no cumpliría los requisitos de seguridad alimentaria exigidos a las producciones comunitarias. Por su parte, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha considerado que los ganaderos comunitarios no podrían competir con los bajos costes de un modelo de producción que está exento del cumplimiento de las exigencias europeas en materia sanitaria, medioambiental, laboral, bienestar animal o trazabilidad. Según los datos de esta organización, y en el caso concreto del vacuno de carne, el 80 % de las compras comunitarias a países terceros proceden de Mercosur, en tanto que en la carne de pollo, la cifra se sitúa por encima del 60 %. Por su parte, el técnico de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) Carlos Polaino ha remarcado que los países de la UE son los principales importadores de Mercosur en vacuno y que si a estos volúmenes se le añade cualquier cantidad nueva e incluso una liberalización completa puede provocar una caída importante de los precios en origen de hasta un 30 %. Polaino ha insistido en que los productores comunitarios no pueden competir con las condiciones con las que estos países producen, ya que el estándar europeo de producción incluye requisitos en materia de trazabilidad o bienestar animal que no tienen estos Estados. Los últimos datos de la Comisión Europea recogen que en los ocho primeros meses de este año, Brasil se mantuvo como principal abastecedor de vacuno a los países de la UE, con 80.112 toneladas, seguido de Argentina (43.417 toneladas) y Uruguay (37.464 toneladas). En el caso de España y en 2010, las importaciones de vacuno de estos países alcanzaron 15.695 toneladas, de las que 10.396 toneladas procedían de Uruguay, 3.518 de Brasil, 1.598 de Argentina y 183 de Paraguay, según los datos facilitados por Asoprovac.