2011 cerró con una fuerte caída en la producción de carne en Chile. Durante la temporada pasada, la producción industrial de carne bovina alcanzó las 190.979 toneladas, lo que representa una disminución de 9,4% con respecto al año anterior: en total, 19.766 toneladas menos.
Según señala en su informe mensual elaborado por la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), la baja se debe parcialmente a la retención de vientres que ha venido experimentando el país y que se confirma con la disminución en la producción de carne de vaca.
Este segmento muestra un descenso acumulado de 14,9%. Mientras, los novillos también experimentaron una baja leve de 3,8% respecto en relación al ejercicio a 2010.
Adicionalmente, la disminución en la producción se da en un contexto de baja más intensa en el número de animales beneficiados, la que llega al 11,5%.
Y esto se relaciona además con otro dato: el peso promedio de novillos faenados durante el año 2011 fue 5,5 kilos superior al alcanzado en 2010.
Lo anterior, según el análisis, se debería a que los productores han mantenido sus animales el mayor tiempo posible para lograr un peso de término más alto y así aprovechar de la mejor manera los precios históricos que se registraron: el ganado en pie mostró variaciones de 21,3% y 11,7% para vacas y novillos en pie en la temporada pasada.
Entre los productores, la señal del mercado es clara. “Estamos viendo desde hace ya un tiempo que los precios del ganado en pie van en alza. Por lo mismo, se está en el proceso de aumentar la oferta faenable. Pero mientras debemos ganar algunos de kilos más para poder aprovechar el boom de precios”, señala el ganadero Francisco Galvez.
En ello coincide el pequeño ganadero de Vilcún, Luis Eduardo Henríquez. “Ahora estamos aprovechando la ‘época de vacas gordas’. Los precios están altos y muchos estamos trabajando para mejorar nuestros números. En todo caso, la falta de agua en diciembre y enero nos afectará. Esperamos poder enfrentar el invierno con suficiente forraje”, acota.
En Fedecarne, en tanto, en reiteradas ocasiones han señalado que uno de los desafíos de los ganaderos chilenos es mejorar la producción por hectárea, de manera de sacarle más provecho a la buena calidad de las pasturas del sur de Chile.
Fuente: Revista del Campo Sureño