El consumo de carne vacuna por habitante, en el primer mes del año, se ubicó en un nivel equivalente de casi 60 kilogramos por habitante y por año y experimentó una mejora de 13,7% anual.
Las exportaciones de carne cayeron 36,6% anual en el comienzo del año, con una baja de ocho mil toneladas, y en total se certificaron embarques por el equivalente a 13.782 toneladas, según un informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (CICCRA).
El consumo de carne vacuna por habitante, en el primer mes del año, se ubicó en un nivel equivalente de casi 60 kilogramos por habitante y por año y experimentó una mejora de 13,7% anual.
No obstante, se mantuvo casi 17% por debajo del nivel alcanzado en enero de 2007, cuando llegó a un máximo relativo de 71,9 kilos.
En enero el consumo interno absorbió casi 206 mil toneladas y se ubicó 14,8% por encima del registrado en enero de 2011.
De este modo, su participación en la producción total subió de 89,2% a 93,7% en los últimos doce meses.
A la inversa, las exportaciones de carne registraron una caída de 36,6 por ciento anual en el comienzo del año con 8.000 toneladas menos.
En total se certificaron embarques por el equivalente a 13.782 toneladas y su participación en la producción total disminuyó en 4,5 puntos porcentuales en los últimos doce meses, hasta quedar ubicada en apenas 6,3 por ciento.
La Cámara destacó que "los daños sobre los índices de preñez" se podrán estimar "a partir de finales de marzo-comienzos de abril, una vez que se hayan realizado los tactos".
El 2011 fue un año de escasas precipitaciones, por lo que se ingresó en el período de sequía más fuerte con poca reserva de agua en el suelo y la falta de lluvias durante casi 60 días con temperaturas superiores a los 30 grados centígrados generó una muy escasa oferta forrajera, "con un importante número de productores que se vieron obligados a alimentar a sus animales con rollos".
"Esta combinación sequía-falta de forraje-altas temperaturas atenta contra la aparición del celo en las vacas y ocurrió desde noviembre hasta mediados de enero, período coincidente con el servicio, por lo que es dable esperar que los tactos muestren menores índices de éxito", sostuvo el análisis.
El año comenzó con una faena vacuna de aproximadamente 976 mil cabezas.
Por tercera vez en cuatro meses resultó superior a la de igual mes del año anterior, y señaló que lo peor de la crisis ya quedó atrás.
"En esta ocasión la suba habría sido levemente superior a 10% anual, lo que implica que se habrían faenado casi 90 mil cabezas más que en enero de 2011", indicó el Informe Ganadero Económico Mensual.
La mejora que se registró se debió en gran medida a que en enero del año pasado se estableció la peor performance de los últimos 33 años.
En lo que respecta a la participación de las hembras en la faena total, indicador relevante para determinar si la fase de recomposición de existencias continúa en el tiempo, en el primer mes del año fue de 39,3% y se ubicó 0,3 puntos porcentuales por debajo del registro de enero de 2011.
Es decir que el proceso de retención de vientres continuó en marcha durante el inicio del año calendario.
La recuperación de la actividad frigorífica vacuna desde niveles mínimos y una contracción significativa de los envíos al exterior, permitieron que en enero de 2012, el consumo doméstico creciera casi 15% anual.
Fuente: Primicias Rurales