Frigoríficos pagan hasta US$ 2.000 por camión para evitar robos.
Algunas plantas frigoríficas están enfrentando un fuerte encarecimiento de los fletes de la carne vendida a Chile, pues tienen que pagar entre US$ 1.200 y US$ 2.000 por camión para evitar robos de la carga en su trayecto por Argentina.
La exportación de carne bovina hacia el mercado chileno creció 99% hasta la primera quincena de julio, al ser comparada con igual fecha del año anterior. Los frigoríficos uruguayos llevan colocados 14.062 toneladas (peso canal) cuando a igual fecha del año anterior se habían vendido 7.065 toneladas, según avalan los datos estadísticos del Instituto Nacional de Carnes (INAC).
Por un lado, la industria uruguaya aprovecha la ausencia de la carne bovina guaraní -quedó fuera del mercado chileno por los problemas a raíz de la aftosa-, por otro, los chilenos apuran la importación previo a sus fiestas del 17 y 18 de septiembre.
En el medio de ese auge exportador, surgió un nuevo problema que opaca el crecimiento y complica los negocios. Varias plantas frigoríficas exportadoras están teniendo que pagar entre US$ 1.200 y US$ 2.000 por camión para que se les garantice la custodia de la carga a su paso por territorio argentino -las empresas importadoras chilenas así lo exigen- y evitar ser robadas. Es que los seguros no cubren el siniestro. Esto es porque meses atrás un camión de Frigorífico San Jacinto con un contenedor de 20 toneladas que iba hacia Chile fue robado a su paso por Argentina y otros tres camiones chilenos sufrieron el mismo problema, generando alarma entre los exportadores.
El pago de la custodia eleva el costo de los fletes que cuestan (por camión) alrededor de US$ 4.800. Una carga de carne que es transportada por vía terrestre hacia Santiago de Chile demora cuatro días en llegar, trámites de Aduana incluidos, siempre y cuando la cordillera esté abierta; la misma carga por barco demora un mes. Es carne enfriada y no congelada y tiene vencimiento más corto.
"Es un costo más", aseguró Eugenio Schneider, presidente de Frigorífico Casablanca (Fricasa), recordando que se suma a la falta de camiones cuando hay una fuerte exportación y la cordillera da paso.
Schneider recordó a El País que el problema de pagar para garantizar la carga "surgió con fuerza hace meses. Da la impresión de que son organizaciones delictivas que saben más que nosotros sobre la mercadería que va en el camión, la tienen vendida antes de robarla. Son muy eficientes. A veces aparece el camión y el chofer o no aparece nada", agregó.
El industrial aseguró que "hay empresas de camiones chilenas que piden hasta US$ 2.000 por camión para que la carga atraviese Argentina con un custodia que evite el robo. El problema es que algunas compañías de seguros, sobre todo las chilenas no cubren el robo de la mercadería. Un camión de carne son US$ 200.000, sin considerar el vehículo", admitió el empresario. Según la visión del presidente de Fricasa, "se paga la custodia o no se vende".
Niegan trabas dessde Argentina
El Instituto Nacional de Carnes negó que existan trabas de Argentina para la venta de asados, lo que fue suscrito por varios frigoríficos consultados por El País. El diario El Observador publicó ayer que Argentina impone trabas al ingreso de asado uruguayo a través de la suma de nuevos trámites aduaneros. Empero, el vicepresidente de INAC, Fernando Pérez Abella, dijo a El País que en ese ámbito, donde están representadas las gremiales y el Ejecutivo, no se hizo denuncia alguna. La venta de asados a Argentina es un negocio marginal para los frigoríficos, que también los colocan en Rio Grande do Sul. Lo que sí constatan las empresas es que en julio no se exportó nada y lo adjudican al "temor" de los importadores a medidas del gobierno.
Fuente: El País Digital